Llegó el verano (al menos en el almanaque, porque por estas tierras de las montañas suizas donde me hallo, se ha metido una nube loca y no sabe salir, lleva aquí ya más de cuatro semanas, sí veinti tantos días con sus días y sus noches, y no hay manera de que se vaya, parece que le ha cogido el gusto a este lugar).
Pero como sé que en otras tierras sí que ha entrado el verano fuerte, os traigo un postre muy fácil, fresquito y delicioso, muy veraniego.
A pesar de cocerse las peras en vino tinto, no lleva alcohol, porque se evapora al hervir, y lo que queda es como un almibar riquísimo, que al mezclarse con la nata está de miedo.
Los ingredientes son para 4 - 6 personas (no me gusta ponerlas justas, por si alguien quiere repetir)
6
peras
60 gr
de xilitol (también llamado azúcar de abedul)
1
vaso de vino tinto
1
palo de canela
1
limón biológico
1
clavo
Nata
vegana líquida o montada
Pelamos
las peras, las ponemos en una cacerola con la estevia, el xilitol, la
canela, el vino, la cáscara de limón y el clavo.
Las dejamos cocer
a fuego medio-bajo hasta que estén tiernas.
Las sacamos con cuidado
a una fuente bonita y las metemos en la nevera a enfriar hasta la
hora de servir.
Por último le damos el toque de gracia decorando con
nata vegana líquida o montada, al gusto.
Se pueden acompañar con algún tipo de galletitas, por ejemplo palmeritas de hojaldre caseras (que son super fáciles de hacer, y si no os lo creéis, os doy otro día la receta y ya veréis).
¡¡No pueden ser más fáciles!!
¡¡Feliz verano a todos!! y los que tengáis la enorme suerte de ir a la playa, por favor, daros un bañito por mí 😉