jueves, 30 de octubre de 2014

Placeres de la vida. ¡ Entrada n° 100 !

Hoy es un día muy especial. La entrada que estáis leyendo en este momento es nada menos que ¡la numero 100! Apenas me lo puedo creer. Seguro que todos los que tenéis un blog conocéis este sentimiento.

http://dickstolk.files.wordpress.com/2007/09/100.jpg
Foto: dickstol.nl

Bueno, pues he estado pensando en hacer algo especial y se me ha ocurrido organizar un concurso con el tema "Placeres de la vida". Como resulta que a mí esto de la tecnología no se me da, no sé muy bien cómo hacerlo, ya que eso de meter texto en html es para mí más que chino, y lo de colgar links y todo eso no tengo ni repajolera idea de cómo se hace. Así que voy a lo simple.

Fuente: open.salon.com

Las reglas del concurso son las siguientes: 
  • Tema: Aportar una o varias experiencias os deseos que os resulten un placer y que esté relacionado con la forma de vida vegana y/o natural. Como por ejemplo, para mí es un enorme placer bañarme en el mar en un día de lluvia o a la luz de la luna llena.
  • Están exentos los temas que conlleven algún tipo de sufrimiento (tanto a humanos como a otros animales), temas aptos sólo para adultos o que puedan herir la sensibilidad y temas que atenten contra la intimidad y el respeto.
  •  Formas de participar:
  1. publicar una entrada en vuestro blog sobre este tema añadiendo un link a esta entrada de mi blog (o sea:  http://lascosasderocioblog.blogspot.ch/2014/10/placeres-de-la-vida.html) y enviarme vuestro link a esta dirección: rbuzo@hispeed.ch
  2. si no tenéis blog o no os apetece publicarlo en el vuestro,  podéis enviarme (a la misma dirección) una descripción de vuestro placer  y si es con foto, pues tanto mejor.
  • Idioma: español, inglés o alemán.
  • El plazo para enviar los placeres es hasta el 30 de Noviembre (inclusive).
  • Selección: Pasado este plazo editaré en mi blog todos los placeres que me hayáis enviado y los podréis votar durante dos semanas en el apartado de "comentarios" o enviándome un email. Se valorará la naturalidad, la sencillez, el grado de placer que produzca a otras personas, el grado de respeto a la naturaleza y a otros seres, el humor, la belleza y otras características agradables.
  • Premio: El placer más votado será el ganador y su "dueñ@" recibirá como regalo el placer de disfrutar de uno de estos regalos a elegir: "Mi libro de cocina vegana" (el primer libro de cocina vegana de fabricación española y del que tengo el placer de ser su autora), o un par de zapatillas veganas artesanales hechas con mis manitas.
  • Para celebrar la entrada número 100, tod@s l@s participantes recibirán un regalo. Se trata del cuento "Dilo por mì". Para poder enviároslo debéis indicar vuestra dirección en el email que me enviéis.
Así de simple.¡Y ahora a disfrutar de la vida, que esconde muchos placeres!

Ah! un pequeño favor: os agradecería que enlazárais esta entrada a vuestras redes sociales, yo no tengo, pero me alegraría un montón que participaran muchas personas. Gracias y os espero...!

Este es uno de mis placeres de la vida:
Rebañar el cacharro de derretir el chocolate
And last but not least, quiero darle una vez más las gracias a mi amiga Mariam de "La Tetera Verde" por insistirme a empezar este blog y darle el primer empujón para que viera la luz.

viernes, 24 de octubre de 2014

Caracoles de almendra y albaricoque

Poco a poco va apeteciendo quedarse en casa en plan acogedor, encender el horno, hacer pasteles y merendar con una infusión calentita de esas que además sirven para calentarse las manos. Cómo echo de menos la mesita de camilla...!!

Estos caracoles tienen la propiedad de llenar bastante pero sin engordar porque todo el dulzor apenas tiene calorías, así que incluso podemos comernos dos caracoles de una sentada (aunque yo con uno tengo de sobra).

Estos los hice con harina de espelta tipo 630
Masa:
500 gr harina integral de espelta
1 paquetito de levadura de panadería o 40 gr levadura fresca
250 ml leche vegetal tibia
1½ cucharadas de linaza molida + 3 cucharadas de agua
75 gr margarina vegana (a temperatura ambiente)
½ cucharadita de sal
4 puntitas de cuchillo de estevia

Relleno: 
200 gr almendras molidas
100 gr Crème fraîche vegana (ver receta abajo)
3 puntitas de cuchillo de estevia
60 gr xilit
1 manzana pelada y rallada
1 cucharadita de canela
Esencia de vainilla

Mermelada de albaricoque casera (ver receta abajo)

Crème fraîche:
50 gr tofu
75 gr tofu sedoso
1 cucharada de aceite
1 cucharada de zumo de limón
20 gr. xilit
1 pizquita de sal

Mezclamos la linaza con el agua y lo dejamos reposar un rato.

Diluimos la levadura en la leche tibia. Agregamos la harina, la margarina, la sal, la etevia y la linaza. Amasamos hasta obtener una masa suave y elástica. Metemos la masa en un cuenco grande, lo tapamos (yo suelo meter el cuenco en una bolsa de plástico) y dejamos que suba la masa en un lugar cálido durante 1 hora (por ejemplo debajo de la mesa de camilla). La masa de levadura no puede hacerse con xilit, ya que éste impide que suba.

Mientras tanto preparamos el relleno. Primero preparamos la crème fraîche mezclando todos los ingredientes en la batidora (podemos usar sólo tofu sedoso, pero la mezcla de ambos tofus hace la masa menos líquida). Luego mezclamos bien a mano la crème fraîche con las almendras, la estevia, el xilit, la manzana rallada (que sustituirá al huevo), la canela y la vainilla.

Mezclamos la mermelada con 1-2 cucharadas de agua y la batimos con la batidora para que quede muy suave

Una vez que haya subido la masa de levadura la volvemos a amasar un poco y la dividimos en dos partes iguales. Con un rodillo hacemos con cada parte un rectángulo de unos 12 x 30 cm. Extendemos el relleno de almendras por toda la superficie y enrollamos. A continuación cortamos cada rollo en 12 rodajas iguales, las colocamos en una bandeja de horno cubierta con papel de hornear, metemos en una bolsa de plástico y las dejamos subir en un sitio cálido durante 30 minutos

Precalentamos el horno a 200° y cocemos los caracoles durante 20 minutos.

Una vez fuera del horno los cubrimos aún calientes con mermelada de albaricoque casera.

Estos están hecho con harina integral de espelta recién molida. Suben menos pero son más sabrosos y sanos
Mermelada de albaricoque:
1 kg albaricoques (pesados con hueso)
6 puntitas de cuchillo de estevia
100 gr xilitol
1 chorrito de agua

Lavamos y picamos los albaricoques, los ponemos a cocer a fuego medio durante 15-20 minutos, hasta que se consuma el líquido.

Echamos la mermelada caliente en botes de cristal esterilizados, cerramos y ponemos los botes bocabajo para que se haga el vacío.

Los botes podemos estirilizarlos fácilmente llenándolos de agua hirviendo sin olvidar la tapadera y el borde. Tiramos el agua y los dejamos secar bocabajo.

¡Que tengáis un fin de semana calentito y acogedor!

miércoles, 15 de octubre de 2014

Crepes con espinacas y piñones

Los crepes (que creo que se dice "las crepes", pero nosotros siempre hemos dicho "los crepes") son algo divertido, fácil y muy socorrido. Es de las primeras cosas que nos atrevemos a probar en la cocina, quizás con alguna amiga de la pandilla, a ser posible en su casa (porque la cocina se queda que da pena), y luego el gusto de comer algo hecho por una misma, con unas gotitas de zumo de limón y varias cucharadas de azúcar, o con mermelada, ja, ja, ¡lo que son las cosas!, ¿quién iba a mí a decirme en aquella época que llegaría a hacer crepes sin huevo, sin leche, sin azúcar y que los disfrutaría igual?

Los crepes de hoy no llevan azúcar ni mermelada, aunque podemos rellenarlos igualmente con mermelada sin azúcar, chocolate, frutas con yogur, etc., etc... Los que hoy os presento van rellenos de espinacas con piñones y cubiertos con bechamel.


Me ha salido una receta muy larga, pero son muy sencillos de hacer.

Crepes (para 4 personas)

150 gr harina integral de espelta
350 ml. leche de soja
Un poco de sal
Aceite de girasol para freírlos

Mezclamos bien la harina con la leche de soja y la sal con unas varillas. Debe quedarnos una mezcla líquida pero con cierto cuerpo.

En una sartén mediana antiadherente (la mía es de 16 cm Ø de fondo) echamos unas gotas de aceite, cuando esté caliente ponemos un poco de la mezcla en la sartén con un cucharón. La extendemos por toda la superficie rápidamente moviendo la sartén en el aire de un lado para otro (debe cubrir toda la superficie sin quedar demasiado grueso). Dejamos que se haga un momento a fuego fuerte, movemos la sartén para que el crepe se despegue, y ahora viene la parte más divertida: con un impulso rápido y seguro echamos el crepe al aire de modo que se dé la vuelta y lo recogemos hábilmente con la sartén. Si no os atrevéis, podéis simplemente darle la vuelta con una espátula. Es cuestión de probar y cogerle el tranquillo ;-)

Relleno de espinacas:

½ kg espinacas congeladas
1 cebolla pequeña
1 diente de ajo (opcional)
Sal
Aceite de oliva
Un puñado de piñones

Cocemos las espinacas con un poquito de agua y sal. Cuando estén tiernas las escurrimos.
Picamos la cebolla y los ajos muy menudos y los freímos en un poco de aceite a fuego medio. Rehogamos las espinacas con la cebolla y los ajos. Rectificamos de sal y agregamos los piñones.

Bechamel:

1 cebolla pequeña
2 cucharadas de margarina o de aceite
2 cucharadas rasas de harina integral de espelta
½ l. leche de soja
Nuez moscada
Sal

Picamos la cebolla muy menuda y freímos en una cacerola a fuego medio hasta que quede transparente. Agregamos la harina y la rehogamos un poco con la cebolla, luego añadimos un poco de leche y desleímos la harina moviendo rápidamente con una cuchara de madera, vamos agregando leche poco y poco sin dejar de remover para que no salgan grumos. Debe quedarnos una bechamel clarita, así que si es necesario añadimos un poco más de leche de soja. Por último sazonamos con la sal y la nuez moscada.

Para emplatar rellenamos los crepes con las espinacas, los enrollamos y repartimos unas cucharadas de bechamel por encima. Podemos decorar con cebollino picado. 

Con dos crepes por persona es suficiente porque llenan.

Espero que os gusten,  ¡buen provecho!


jueves, 9 de octubre de 2014

Los regalos no comestibles de la naturaleza

Como ya os prometí aquí, quiero compartir con vosotros los tesoros no comestibles que me ha regalado la naturaleza este verano.

No es nada fácil elegir porque que he tenido la suerte de recibir muchos regalos, así que aquí van sólo algunos:









 








La naturaleza está llena de tesoros, sólo hay que abrir los ojos y el corazón para descubrirlos.





lunes, 6 de octubre de 2014

Sopa de tomate con almendras

¿A que poco a poco se van apeteciendo platos calentitos?

El otro día me puse a "despejar" el congelador y los cajones de la cocina, que de vez en cuando es necesario porque se van acumulando muchas cositas, restitos de esto y de lo otro, y llega un momento en que resulta de lo más molesto. Y mira por donde que me salió una sopa de lo más rica. 

Encontré un resto de tomate, unas bolitas de soja listas para comer, un trozo de pan congelado desde el invierno pasado, un resto de polenta en un paquete, cebolla picada (que congelé un día que me dió por picar cebolla) y a eso le añadí un puñado de almendras. Y esté fue el resultado:


Como no siempre tenemos restos os doy la versión "oficial":

1 cebolla gorda
1 tomate grande
2 dientes de ajo
1 puñado de almendras
1 trozo de pan duro
1½ l. caldo vegetal
1 puñado de arroz integral por persona
100 g de tofu
Salsa de soja
Perejil
Aceite de girasol

Cortamos el tofu en dados y lo ponemos a macerar en salsa de soja rebajado con agua durante al menos una hora. Removemos de vez en cuando para que coja el sabor por igual.

Hacemos un frito a fuego lento con la cebolla, el tomate y los ajos con un poco de aceite. Cuando esté listo lo pasamos por la batidora y lo añadimos al caldo.

Aparte freímos las almendras y el pan, los molemos y lo agregamos a la sopa. En ella cocemos el arroz.

Por último rehogamos el tofu macerado en un sartén con algo de aceite y lo añadimos. Si preferís podéis usar bolitas de soja texturizada previamente cocidas en caldo vegetal con un chorrito de salsa de soja.

Podemos acompañar la sopa de daditos de pan frito o tostado. Yo la he acompañado de cuadraditos de polenta, que sirven también como guarnición para platos de verduras o de tofu o seitán en salsa.

Cuadraditos de polenta:

Cocemos polenta siguiendo las instrucciones del paquete (la proporción suele ser de 1:4, o sea, por 100 g de polenta 400 ml de agua). La extendemos en un fuente y dejamos que se enfríe. 

Luego la cortamos en cuadrados y la emborrizamos en una mezcla de pan rallado y cornflakes triturados. Al gusto podemos añadirle al pan rallado un poco de ajo en polvo y perejil.

Freímos los cuadrados de polenta por los dos lados en una sartén con un poco de aceite. Los vamos sacando sobre un papel de cocina para que pierdan la grasa sobrante. Se sirven calientes.

Son super fáciles y quedan deliciosos, con una costra crujiente ...hmm!!


¡Que tengáis un buen día y disfrutéis del solecito otoñal!


miércoles, 1 de octubre de 2014

Restaurante vegetariano "Yamm!" en Viena

Hoy es el día mundial del vegetarianismo y para celebrarlo os voy a presentar el restaurante vegetariano "Yamm!" en Viena. 


Está en Universitätsring 10 en 1010 Wien y abre todos los días excepto el domingo.

Allí se puede desayunar, almorzar y cenar. Tienen un buffet muy amplio con muchos platos veganos. En cada plato se indica a través de unos símbolos si no tiene lactosa o gluten, si es vegano, picante o le gusta a los niños.

 legenden

El precio depende del peso y si se consume in situ o es para llevar.  Al entrar te dan una tarjeta y cuando hayas elegido todo lo que quieres comer lo pesas y pasas la tarjeta (una vez que se le coge el tranquillo no es difícil).





































Además tienen una carta grande de smoothies, servicio de catering y organizan conferencias una vez a la semana.


Si vais por Viena esta es una buena opción para reponer fuerzas o pasar un rato agradable tomando algo.